Las federaciones miembro de la FIFA están en el centro del ecosistema global del fútbol, representando a 211 países y territorios en seis continentes. Estas federaciones miembro son responsables del desarrollo y la gobernanza del fútbol dentro de su territorio, incluyendo la organización de competiciones, el fomento de programas de base y la promoción del deporte en todos los niveles. Trabajan para garantizar que el fútbol prospere como una fuerza unificadora dentro de sus comunidades, fomentando la participación y brindando oportunidades para que los jugadores, entrenadores y árbitros crezcan. Las federaciones miembro también desempeñan un papel crucial en la preservación de la integridad del juego al hacer cumplir las regulaciones de la FIFA y promover el juego limpio, la inclusión y el respeto dentro y fuera de la cancha. La FIFA mantiene una relación cercana y colaborativa con sus federaciones miembro, apoyándolas con inversiones, experiencia técnica y orientación estratégica. A través de programas de desarrollo como FIFA Forward, la FIFA proporciona financiamiento para mejorar la infraestructura, optimizar la capacitación y ampliar el acceso al fútbol para todos. Esta asociación asegura que las federaciones miembro puedan lograr un crecimiento sostenible y tener un impacto duradero en sus regiones. Al trabajar juntos, la FIFA y sus federaciones miembro fortalecen a la familia mundial del fútbol, construyendo un futuro más inclusivo, diverso e innovador para este deporte.